COHECHO Y VIOLACIÓN DE DEBERES

Sargento, detenido por recibir sugestivos "favores" de parte de presos en la ex Fandet

Hay 83 CD que revelarían ingresos nocturnos de parientes y novias de presos, cercanos al clan de "Los Talibanes". A cambio, al menos cinco policías recibían regalos "surtidos".

Un sargento de la policía, ex jefe de Guardia en el Centro Único de Detenidos de la ex- Fandet, fue detenido, sospechoso de estar involucrado en una larga cadena de favores especiales, incluidos sexuales, a algunos presos.

Según la investigación timoneada por la fiscal Érika Leguizamón, el acusado sería Claudio Fernando Orieta, a quien se enrostraron los delitos de "cohecho agravado" e "incumplimiento de los deberes de funcionario público".

Todo se precipitó cuando la Fiscalía bandeña profundizó una causa por "homicidio en grado de tentativa", en mayo del 2015, en perjuicio de Miguel Roberto Subire, atacado a machetazos en un partido de fútbol.

Teléfonos intervenidos

Por ella, la Fiscalía ordenó la intervención de los celulares de la familia de Víctor, Jesús y Sergio Mauricio Araujo, miembros del clan bandeño denominado "Los Talibanes".

Las "escuchas" telefónicas habrían delatado múltiples diálogos entre los presos y mujeres familiares y también novias, merced a celulares atribuidos a cinco policías: el sargento Orieta, más un cabo, dos agentes y un oficial ayudante, se supo.

A contrapelo de la Ley y normas internas del Centro Único, entre los presos que pedían el celular al sargento estaban los imputados Sergio y Jesús Araujo, beneficiados con algunos "ingresos" de madrugada al predio.

Por aquello de que nada es gratis en la vida, en reciprocidad, los Araujo "regalaban" a los uniformados lechones faenados, reposeras de madera, asados y otros "presentes".

No sólo el estómago policial debía ser saciado por los familiares de los presos. También los diálogos sacaron a la luz insinuaciones sexuales con una hermana menor de ciertos detenidos.

Por ahora, la investigación devino en la caída del sargento, a quien se consideraría el "cerebro" de las "negociaciones" con los bandeños, viciadas de ilegalidad.

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