"No debe ser de aquí el que hizo esa locura", dijo el dueño de casa
El propietario de la casa que cuidaba Teresa señaló ayer que la conocía hace muchos años y lapidario sentenció: "No debe ser de aquí el que hizo esa locura".
Hoy jubilado, Juan Próspero Ferreyra (alias "Pope") recuerda: "Trabajé como policía en tiempos del proceso. Viví en esa casa casi siempre. Me vine a Los Telares para estar más cerca de la ciudad".
En cuanto a su vínculo con Teresa, explicó: "Ambos nos hacíamos un favor. Ella no tenía casa. Yo sí, pero nadie había para cuidármela. Arreglamos que con su esposo se quedarían allá y de paso me verían unos patos, chanchos y 46 cabras".
Ambas familias no se frecuentaban. Apenas "Pope" se llegaba cuando quería cocinar alguna cabra o chanchito. Y nada más, dijo.
"No sabía nada de la pobre Tere. Era una chica muy buena y calladita. Cuando la encontraron, la policía buscó a mi hijo, pero después lo liberaron. Estoy seguro de que no debe ser de aquí el que hizo esa locura".