Juzgan a hermanos por violar a sus sobrinitos de 8 y 9 años
Los pequeños eran vejados cuando su padre los retiraba y los conducía hasta su hogar donde estaban los acusados.
Durante más de un año, una nena y su hermanito, de 8 y 9 años, fueron ultrajados sexualmente por los tíos paternos en la ciudad de Clodomira (Banda), en oportunidad en que su padre (separado) los retiraba del hogar y los llevaba al suyo, merced a un régimen de visitas.
Las calamidades sexuales de los acusados acaban de salir a la luz, al iniciarse en la víspera el juicio oral a los tíos (de más de 30 años) en la Capital, a cargo de un tribunal. Según la instrucción judicial que timonea la fiscal Jaqueline Macció, en el 2014 la niña le pidió a su madre no visitar más a su papá.
Separación
La pareja se encontraba separada. Previa batalla judicial, al hombre le fue concedido un régimen de visitas semanal. Por ende, buscaba a sus hijos y los llevaba a la casa paterna. En ella también residían los dos sujetos que ahora son juzgados por "abuso sexual con acceso carnal", trascendió.
Con lógica sorpresa, la mamá indagó en el porqué. Ya junto a su hermanito, la niña relató que sus tíos los manoseaban, por separado, y les hacían cosas que les dolían. Una vez, en la casa; otras tantas, en el monte. En todas las ocasiones, imperaban las amenazas de castigos físicos y hasta de privarlos de la comida.
Horror de la madre
En la furia y amargura, la madre fue a la policía y denunció a sus dos excuñados. Hoy, están enrejados y enfrentan un juicio y el interrogante dominante es: ¿ignoraban las acciones del otro? ¿O se coordinaron para realuzar estas prácticas aberrantes?
Para la Justicia, los hermanos no "actuaron" al azar: uno y otro compartían las mismas bajezas.
Antes de que el debate ingresara por sus carriles convencionales, la defensa ayer pidió que sus dos clientes fuesen beneficiados con el juicio abreviado que requiere previo reconocimiento de culpabilidad. Es decir, los hermanos asumieron y confesaron que ultrajaron sexualmente a sus dos sobrinitos.
El tribunal
Desde esa certeza, el planteo ha sido aceptado por las vocales Graciela Viaña de Avendaño, Margarita Piazza de Montoto y Élida Suárez de Bravo. Ambas partes habrían fijado una condena de diez años que en los próximos días será develada en sentencia.
Antes, los funcionarios pulirán los detalles de la sentencia. Y lo más importante, los fundamentos de la posible pena por aplicarse.