BODAS CATÓLICAS

Los novios santiagueños le escapan al compromiso y demoran la unión por Iglesia

Aunque por el Registro Civil se casan más de 600 parejas por año, cada fin de semana son dos o tres las parejas que reciben el sacramento del Matrimonio.

Los novios santiagueños no tienen apuro para llegar al altar e incluso muchos eligen no pisar la iglesia cuando de comprometerse se trata. En Santiago del Estero en este último tiempo se han registrado más de 600 casamientos por año en el Registro Civil, pero en las parroquias llegan dos o tres parejas por fin de semana para recibir el sacramento de la Iglesia Católica.

Los sacerdotes aseguran que han disminuido los matrimonios y le atribuyen como causa "una fe católica poco comprometida" y a que a los jóvenes en general les cuesta asumir la responsabilidad de formar una familia.

El "para siempre" atemoriza a muchos que prefieren convivir antes de decir "sí, quiero" para toda la vida.

Sin embargo, desde el Movimiento Familiar Cristiano aseguran que la mayoría de las parejas que llegan al curso prematrimonial son aquellas que ya tienen muchos años de convivencia y varios hijos. (Ver página 19).

Otro aspecto a tener

en cuenta es que la mayoría de las parejas elige no realizar el curso antes del matrimonio para evitar "perder tiempo".

No al compromiso

La parroquia San Francisco Solano es una de las más solicitadas para las bodas, pero en este templo donde hace 20 años se celebraban hasta siete casamientos por fin de semana, hoy llegan hasta tres parejas por fin de semana.

El padre Eduardo Zatti, de esta parroquia, dialogó con EL LIBERAL y dijo que si bien han disminuido los casamientos, "la gente creyente se sigue casando. Generalmente, los fines de semana tenemos dos o tres casamientos, menos que años atrás".

Consultado por las causas de esta disminución, el sacerdote reflexionó: "Esto se debe a que hay una fe católica poco comprometida. A los jóvenes en general les cuestan adoptar una actitud firme, decidida y responsable frente a la vida para siempre, como tiene que ser el matrimonio cristiano. Por eso prefieren convivir, sin casarse. Nosotros los respetamos, pero les decimos a quienes son creyentes católicos que en realidad no está bien".

También atribuyó esta disminución "al cambio cultural del siglo XXI" y subrayó que en este marco "no es una cuestión solamente de los jóvenes frente al casamiento, sino también frente a otra opción que hagan en su vida".

"Hoy en día el joven se entusiasma, pero le cuesta aceptar lo que se llama el compromiso ‘para siempre’. Así que sucede en todos los órdenes de la vida, inclusive en la profesión", sostuvo.

La mayoría de las parejas de Santiago elige casarse los viernes y sábado, pero la parroquia San Francisco eventualmente se acepta realizar casamientos los domingos.

"En general la mayoría de las parejas tienen entre 25 y 35 años. Hay parejas de 40 años, incluso de 70 años o más que se casan en circunstancias especiales", dijo Zatti.

Ir a la nota original

NOTICIAS RELACIONADAS

MÁS NOTICIAS