Santiago del Estero fue otra vez la ciudad más caliente del país
Con 40.8 grados a las 16, lideró el ranking del Servicio Meteorológico Nacional. Recién para el viernes se vaticinan lluvias.
Luego de que se diera una seguidilla de jornadas agradables, el calor sofocante volvió a decir presente en Santiago del Estero.
En sus actualizaciones de la siesta de ayer, el ranking del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) indicó que la ciudad capital estuvo por encima de Las Termas de Río Hondo y Chamical (La Rioja) entre otras, con el mayor nivel de temperatura.
A las cuatro de la tarde el termómetro marcó 40.8 ºC lo que volvió en un verdadero infierno el transitar de la ciudad.
La temperatura máxima de ayer fue de 40.8 grados, aunque la sensación térmica se ubicó un par de grados por encima, debido a que el porcentaje de humedad llegó a una máxima de 64%. La mínima fue de 19.3 grados a las seis de la mañana.
De acuerdo con lo que informa el organismo, este clima se mantendrá así por los próximos días y recién el jueves o viernes podría hacerse presente la lluvia.
Cómo sigue
Según el SMN, la jornada de hoy en nuestra provincia se presentará con nubosidad variable y vientos moderados a leves del sector norte, y con un leve aumento de la temperatura, ya que la mínima pronosticada es de 20 grados y la máxima de 41.
La nubosidad irá en aumento el resto de la semana, y para el viernes por la tarde se anuncia un alto índice de probabilidad de precipitaciones.
Por consiguiente se recomienda tomar todos las medidas de prevención posibles para evitar sufrir las consecuencias como lo son los golpes de calor, deshidratación, insolación, etc.
Alerta
Frente a estas condiciones climáticas, el Ministerio de Salud de la Nación advirtió a la población estar alerta frente a los síntomas que pueden indicar estar sufriendo un golpe de calor.
Es importante estar alerta ante los siguientes síntomas: sed intensa y sequedad en la boca; temperatura mayor a 39º C (medida en la axila); sudoración excesiva; sensación de calor sofocante; piel seca; agotamiento, cansancio o debilidad; mareos o desmayo; vértigo; calambres musculares; agitación; dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos; dolores de cabeza (sensación de latido u opresión); estado de confusión, desorientación, delirio o incluso coma o convulsiones.
Los bebés además pueden evidenciar la piel muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal e irritabilidad.