Aberrante: jornalero de 56 años abusó y embarazó a una menor indocumentada
Padece retraso madurativo y en Cámara Gesell reveló que una familiar la "entregaba".
Un escalofriante caso de abuso sexual -que tiene ribetes que rondan lo morboso y repulsivo- está siendo minuciosamente investigado por la Justicia de La Banda a través de la Unidad de Abusos Sexuales, a donde llegó la información sobre el aberrante caso.
Fuentes de confianza indicaron que se tomó conocimiento del caso cuando médicos del nosocomio bandeño asistieron a la menor -quien presenta un embarazo de cinco meses de gestación- la que arribó en compañía del supuesto padre del bebé, un hombre de 56 años.
La llamativa diferencia de edad y la situación en la que se encontraba la menor llamó la atención de los profesionales, quienes rápidamente dieron intervención a su equipo de asistentes sociales y psicólogos. Fue a ellos a quien la víctima les reveló que el sujeto que la acompañaba la golpeaba y la sometía a sus bajos instintos.
Con tamaña afirmación de la menor, los médicos del Centro de Salud Banda dieron intervención a la defensora Civil -Dra. Saavedra- quien de inmediato se comunicó con la Unidad de Abusos Sexuales de La Banda y brindó pormenores de lo que estaba sucediendo.
Visita al Cisb
Según se supo, de inmediato la coordinadora de la mencionada unidad -junto con una instructora, una asistente social y una psicóloga- arribó al nosocomio bandeño y habló con los médicos que asistieron a la víctima y se secuestró la historia clínica.
Más tarde, las autoridades del Ministerio Público se entrevistaron con la menor quien contó algunos detalles sobre su familia. Ésta remarcó que reside con su tía y sus hermanas. Todos serían indocumentadas y la víctima indicó que no sabe cuántos años tiene. Tras tomar conocimiento del aberrante hecho, la fiscal solicitó una serie de medidas, entre ellas la Cámara Gesell a la futura mamá. Según se supo, la víctima contó ante los peritos del cuerpo de psicólogos que el acusado está casado y tiene una hija de la edad de la víctima.
Al parecer el acusado -un jornalero- aprovechaba que la menor jugaba con su hija para "ganarse" su confianza.
Días posteriores comenzó a concurrir en forma asidua a la casa de la adolescente y tras "hablar" con una familiar, ingresaba a la habitación donde ella se encontraba.
La menor reveló que su pariente dormía con ella pero cuando el acusado llegaba, ésta persona sacaba su colchón y dejaba a la víctima a solas con el imputado.
Además reveló que en reiteradas oportunidades se resistió a los ultrajes y por ello recibía brutales golpizas. En los próximos días, la fiscalía tomará testimonio a familiares de la víctima y del acusado.