Celiaquía: la importancia del diagnóstico temprano y acertado para lograr una buena calidad de vida
Una de cada cien personas padece celiaquía en el mundo. Llevar una óptima calidad de vida es posible si se saben analizar los primeros síntomas. Aseguran que estas señales no solo se manifi estan en los intestinos, sino en cualquier órgano. Es fundamental el rol del médico para determinar la enfermedad y su posterior dieta.
La gran difusión que tiene la celiaquía en todos los ámbitos en la actualidad permitió que la sociedad esté más alerta e informada sobre esta enfermedad, lo que posibilita que cada vez más personas lleguen a un diagnóstico certero cada año. Si bien no hay estadísticas oficiales, se sabe que 1 de cada 100 personas padece celiaquía.
Expertos coinciden en que la celiaquía es la intolerancia permanente al gluten, conjunto de proteínas presentes en el trigo, avena, cebada y centeno y productos derivados de esos cuatro cereales.
Sin embargo, el especialista santiagueño, Dr. Edmundo Mondem, amplía el concepto y asegura que “ahora hay otra definición más compleja y más completa que dice que se trata de una enfermedad multisistémica, que no solo afecta al intestino, sino a todos los órganos y por eso, afecta desde el intestino delgado (su punto de partida) y se manifiesta en uno o varios órganos más”.
El Dr. Mondem, gastroenterólogo; la Lic. María Fernández, referente del Programa Provincial de Ayuda al Enfermo Celíaco; Lucrecia Anríquez, presidenta de Acela; y Walter de la Silva, titular de Aceband, conformaron la mesa de Puntos de Vista para abordar la temática y coincidieron en que el paciente celíaco, puede llevar una buena calidad de vida, igual a la de una persona que no padezca la enfermedad.
“Es importante hacer valer sus derechos, exigir que en restaurantes se encuentren comidas especiales, que en una cafetería tengan panificados acorde a sus necesidades, y que en los viajes de larga distancia se puedan encontrar viandas especiales”, indicaron. La celiaquía es la intolerancia permanente al gluten, conjunto de proteínas presentes en el trigo, avena, cebada y centeno y productos derivados de esos cuatro cereales.
El diagnóstico puede confirmarse en cualquier momento de la vida, desde la lactancia hasta la adultez, y tienen mayor predisposición de ser celíacas las personas con algún antecedente familiar que ya padezca esta intolerancia.
“Antes se hablaba de la enfermedad celíaca como enfermedad del niño, y del adulto. Se pensaba que eran dos entidades totalmente distintas; lo que sucede es que hay pacientes que van a desarrollar su enfermedad en la niñez y el médico lo diagnosticará en ese momento.
Pero el niño no diagnosticado, es muy probable que llegue a la adolescencia y los síntomas desaparezcan porque la enfermedad entra en un período en el que no dará ninguna manifestación.
Entonces llegan a los 22 años y recién vuelven a aparecer aquellos síntomas de la niñez. No hay una edad para ser celíacos, puede pasar en cualquier momento de la vida”, explicó el Dr. Mondem.
En tanto que la Lic. María Fernández expresó que “desde el Ministerio de Salud de la Provincia enfatizamos en la promoción del diagnóstico oportuno.
Tenemos tres centros provinciales de detección de la celiaquía, los cuales se encuentran en el Cepsi “Eva Perón”, el hospital Independencia y en el Cisb, que trabaja sobre todo con la población del interior.
El programa provincial fue creado por el Dr. Mondem en el 2009. Es un arduo trabajo que comenzamos hace dos años y hemos notado el incremento en la detección”.