Myriam Hernández dijo que cantarle al amor le ha permitido ser ella misma

¿Qué le ha posibilitado el hecho de poder expresarse a través del género romántico?

Principalmente, me ha permitido ser yo misma y no tener una doble personalidad. Aquí no hay una Myriam Hernández cantante y una Myriam Hernández persona. Me permite ser la mujer que soy, esencialmente romántica. Esto me hace sentir muy bien, muy cómoda. La gente se va a encontrar conmigo en la calle o en un escenario y no va a haber diferencias. El mantener mi esencia y el poder llevarla a través de la música siendo uno misma es imparable. Me siento libre con eso. Me siento libre de poder decir que además de cantante soy una mujer que lleva ya 24 años de matrimonio, gracias a Dios con una familia muy bien constituida. Tengo dos hijos espectaculares (Jorge Ignacio (21) y Myriam Isidora Saint-Jean (19)), puedo ser hija, amiga, mamá, esposa, hermana sin privarme de poder ser cantante.

¿Cuánto influye la espiritualidad en la toma de sus decisiones?

Cuando uno cree en Dios, independientemente de las religiones, es maravilloso. Creer en Dios es, además, sentirte llena de amor con el deseo de tratar de transmitir el amor al prójimo. En esta vida tenemos que querernos, amarnos, respetarnos y ser mejor personas.