Fue a inscribirse a la universidad y se enteró que figuraba como desaparecido
Desde los 12 años, un joven estadounidense se encontraba en una lista de niños desaparecidos.
Una vida de engaños. Esto es lo que vivió un joven estadounidense, luego de que se enterara que hace 12 años permanece en una lista del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados.
Esta larga historia de engaños comenzó en el 2002, cuando el pequeño Julián Hernández, por entonces de cinco años de edad, desapareció de su casa, luego de que su padre lo llevara lejos de su madre.
Tras el secuestro, el hombre se mudo de Alabama a Ohio, donde asumió una identidad falsa, y ocultando la verdad a su hijo.
Su madre nunca dejó de buscar al menor, por lo que logró que su hijo figurara en la base de datos nacional de desaparecidos.
En 2015, Julián decidió comenzar a llenar los diferentes formularios para ingresar a la universidad, donde descubrió que algunas cosas no cerraban, como su número de la seguridad social y hasta su identidad.
Tras la confusión, el joven se dirigió con un consejero de su escuela para que lo ayudara con los papeles, donde averiguó que Hernández había sido catalogado como una persona desaparecida en el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados.
Tras averiguar quién era en realidad, Julián se reencontró con su madre y consensuó con ella y sus abogados que su padre reciba una pena mínima por su delito, ya que tras haber pasado una infancia sin madre, no quería pasar su juventud sin su padre.