Un final a toda pasión en Old Lions
Los chicos desde la M6 hasta la M14 pudieron disfrutar de dos jornadas que estuvieron cargadas de partidos por el buen número de clubes participantes, que alcanzaron a poner en escena a cerca de 1.500 pequeños jugadores.
La decimotercera edición
del tradicional Encuentro
Interprovincial
de rugby infantil “Julio
Montenegro” fue todo un
éxito. Los chicos pudieron
disfrutar otra vez de
un evento que cada vez
se hace más convocante
y que reafirma la idea de
confraternizar y de compartir
con clubes, sobre
todo de afuera de la provincia,
un momento de
sano esparcimiento y diversión.
La intensa actividad
que se desarrolló íntegramente
en las instalaciones
de Old Lions Rugby
Club, tuvo como protagonistas
a los clubes de
Aranduroga de Corrientes,
Universitario de Salta,
Lince de Tucumán,
Teros de Catamarca, Búfalos
de Totoral, Córdoba,
más los representativos
santiagueños de Fernández
Rugby Club, La
Cañana de Ojo de Agua,
Santiago Rugby, Santiago
Lawn Tennis Club y la
entidad que hizo de anfitriona,
Old Lions.
“Todos los chicos de
diferentes lugares se fueron
contentos y muy felices
por el buen momento
que pasaron entre el sábado
y el domingo. Como
representantes de la institución,
les agradecemos
a todos los equipos por
haber acompañado una
vez más al Encuentro y
ojalá que para el 2017 se
repita el éxito”, expresó
Mariano Macchiarola,
uno de los coordinadores
de rugby infantil de los
viejos leones que estuvo
trabajando intensamente
para que todo se desarrolle
con absoluta normalidad.
P
ara facilitar un poco
justamente la organización
del encuentro, la
comisión que estuvo al
frente de todos los detalles
dispuso que los partidos
se jugaran en las diferentes
canchas que posee
el club y en determinados
horarios que ya estaban
establecidos de antemano.
Es así como el sábado
por la mañana se jugaron
los cotejos correspondientes
a las categorías
M14, M10, M8 y M6,
respectivamente.
Por la siesta, el compromiso
fue para los de la
M13, M12, M11, M9 y M7.
El domingo desde las
9 de la mañana, no paró
de correr la ovalada con
la misma programación
de la jornada anterior,
aunque con menos tiempo
en la duración de los
partidos por cuestiones
de organización.
Cerca de las 13 horas
llegó el cierre del encuentro,
para luego darle paso
al tracional tercer tiempo
en el que los 1.500 chicos
pudieron disfrutar de un
rico almuerzo y despedirse
entre abrazos y gestos
de amistad y compañerismo.
También hubo palabras
de reconocimiento
para las autoridades
del club Old Lions por la
invitación a los diferentes
clubes a participar
del encuentro y por lo
bien que fueron recibidos
cada uno de los chicos,
muchos de los cuales
fueron alojados en
casas de familia. Así pasó
un nuevo desafío para
la entidad de la avenida
Costanera y con la satisfacción
y el orgullo de
haber cumplido otra vez
con uno de los principales
objetivos que se propuso
Julio Montenegro
cuando decidió crear el
club. l