Nahas sorprendido por las "malas diligencias de los tres exjueces"
El funcionario calificó de ilegítimos los embargos; también que el destinatario final fue el empresario radial. Ayer arribó a Santiago, a fin de indagar sobre el futuro del juez en el proceso.
El doctor Mario Fabián Nahas, en representación de Fiscalía de Estado de Tucumán, manifestó su estupor ‘ante las malas diligencias de tres exjueces santiagueños, quienes otorgaron a Pericás (Juan Manuel) casi 9 de los 10 millones embargados ilegítimamente de los aportes coparticipables de la Provincia de Tucumán’.
Así lo destacó el funcionario, al arribar a nuestra provincia ‘para ver si continúa al frente de la investigación el juez Darío Alarcón y obviamente el curso del proceso’.
Recusación y futuro
En tal sentido, señaló que son horas decisivas, ‘dado a la recusación planteada’, pero de todos modos dejó en claro que ‘la nueva etapa probatoria que viene quizá nos lleve a formular nuevas presentaciones’.
Consultado sobre el cimbronazo económico emergente en su provincia, Nahas subrayó: ‘A todas luces, nuestra provincia está asombrada ante las malas diligencias de los exjueces que otorgaron a Pericás cobros de casi 9 de los 10 millones embargados ilegítimamente’.
¿Dictamen de exfiscal?
Consultado si Tucumán conoce sobre un supuesto dictamen refrendado por un exfiscal de Estado, octubre del 2015, que daría luz verde al pago para Pericás, Nahas contestó: ‘Lo desconozco; en su momento, el juez merituará la procedencia o no del planteo’.
¿Consta el documento en la causa?, fue el interrogante emergente: ‘El juez lo verá’, insistió Nahas. Igual, no quita que existan los delitos denunciados’.
Prudencia
Consultado si en el futuro proveerán nuevas pruebas a la batalla judicial, el abogado fue cauteloso: ‘Nosotros esperamos el avance del proceso penal. Así, determinaremos las pruebas por recabar y que naturalmente aportaremos en su momento’, clarificó Nahas a los periodistas.
Más adelante interrogado si habrá nuevas denuncias, señaló que ‘por ahora no’, y añadió: ‘No es a mí a quien corresponde imputar’, trasladando -con ello- el norte jurídico al magistrado que conduce la causa.