Primeras versiones
Si bien hasta ahora todo es materia de investigación, fuentes consultadas revelaron que Ponce, cerca de las 20.30 se encontraba en un taller mecánico de calle Alberdi y Cervantes, propiedad de un hombre de apellido Segovia, a quien tras recibir un llamado le manifestó: “Ya vengo, voy a matar a mi mujer”.
Al parecer, Ponce tenía todo planeado para ultimar a su pareja, ya que él la había llamado en horas de la tarde, “convenciéndola” de que iba a entregarle su ropa para que ésta se fuera de la casa. Al parecer la occisa era víctima de violencia de género.
Según se supo, el matrimonio tenía otros dos hijos, los que se encuentran estudiando fuera de la provincia. Al cierre de la presente edición los efectivos esperaban su llegada.