El nuevo jefe de la F1: "Vamos a hacerla más grande que nunca"
Chase Carey, el próximo presidente, habla de la ambición de Liberty Media de llevar a la Fórmula 1 "al siguiente nivel", junto a Bernie Ecclestone.
Tiene 62 años, es presidente de News Corporation, vicepresidente de 21st Century Fox y, a partir del año que viene, será también el nuevo presidente de la Fórmula 1. Liberty Media, el grupo americano que hizo efectiva ayer la compra del deporte, ha elegido a Chase Carey como su cabeza visible en el campeonato, sustituyendo a Peter Brabeck-Letmathe en el cargo, y llevará las riendas de la F1 con Bernie Ecclestone a su lado. Un vuelco en el organigrama del Mundial que traerá grandes cambios made in USA.
Carey ha comentado su llegada a la F1, y la de Liberty Media, y las ganas que tiene de trabajar con Bernie. "Estoy muy emocionado de unirme a este equipo y el potencial que tiene. Es evidente que la F1 ha sido un enorme éxito sobre todo gracias a Ecclestone, que ha dirigido este negocio durante décadas. Tengo ganas de trabajar con él y estamos de acuerdo en que hay una oportunidad de seguir construyendo este negocio y llevarlo al siguiente nivel", comenta en declaraciones recogidas por Motorsport.
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Y, ¿cuál será el siguiente nivel? ¿Qué novedades traerá?: "La oportunidad es desarrollar este deporte en beneficio de los fans, equipos, socios y accionistas mediante el aumento de su promoción y comercialización: aumentando la distribución de contenidos, sobre todo en formato digital; evolucionando el calendario de carreras; estableciendo una gama más amplia de asociaciones comerciales; aprovechando la experiencia de Liberty en eventos en directo y haciendo nuestros eventos más grandes que nunca".
Así, llegan con el objetivo de hacer de la F1 un espectáculo a lo grande con el estilo americano propio de la Super Bowl, la NBA o la NASCAR. Pero, ¿por qué han elegido la F1?: "Nos atrajo especialmente la forma en la que genera ingresos y que es un modelo de negocio de bajo riesgo. La F1 es un jugador clave en el mercado de alto crecimiento del directo, derechos deportivos premium. Hay una demanda creciente por sus audiencias globales". Las barras y las estrellas controlarán la F1 y prometen traer consigo una verdadera revolución.