El Papa ordenó estudiar la posibilidad de que las mujeres sean diaconisas
El papa Francisco nombró ayer una comisión para estudiar la posibilidad de permitir que las mujeres sean diaconisas, una cuestión que divide a la Iglesia y que supondría un giro histórico para la institución.
La comisión está formada por 13 personas, siete hombres y seis mujeres, y estudiará en especial el papel de las mujeres que ejercieron esta función durante los primeros años de la Iglesia Católica. Tenían una función muy análoga a la de los diáconos. San Pablo habla de ellas en su epístola a los Romanos.
Los diáconos son el primer peldaño de la jerarquía católica y aunque pueden pronunciar sermones durante la misa y oficiar bautizos, bodas y funerales no están autorizados a celebrar la eucaristía o a confesar a los fieles, como los sacerdotes.
Los defensores de la medida argumentan que las mujeres están subrepresentadas dentro de la Iglesia y que no existe ningún obstáculo teológico para que vuelvan a ejercer una función que ya tuvieron en los orígenes del cristianismo. En mayo el Papa abordó la cuestión en una charla con mujeres de varias órdenes religiosas y dijo que "sería bueno" que la Iglesia aclare ese punto.