"Mi hijo me contó que su padre lo abusó en un baldío, al fondo de la escuela"
La Justicia apresó a un municipal, sospechoso de ultrajar sexualmente al hijo. Agobiada por la amargura, la madre del menor confirmó las vejaciones.
"Dos médicos me acaban de informar que mis hijos fueron abusados. El mayor, quizá por años, en manos de su propio padre".
Las palabras de la mujer se ahogan en lágrimas: un torrente que mina sus fortalezas, al contemplar a sus dos hijos, de 8 y 13 años, vejados.
Pero, cómo comenzó esta pesadilla: ella recuerda que la semana pasada el menor le dijo: "Mami, quiero contarte algo". Pensó que se trataba de una travesura. Y no.
Al día siguiente, mientras los hermanitos dormían, el chico llevó a la madre junto a un árbol (en el patio) y le confió su odisea.
"Cuando vos no estás", ("x") (hermano) "se viste de mujer y me hace cosas..."
Bronca y decepción
La mujer reconoció "que la primera reacción que me vino fue golperarlo (al hermano mayor), pero me tranquilicé. No puedo hacer nada violento con él", señaló a EL LIBERAL.
"Cuando vino a la tarde de la escuela, fuimos al patio y le pregunté", ahondó. Al comienzo, el adolescdente negó todo. Su madre llamó al hermanito. Y en minutos, obtuvo la verdad en boca del mayor.
"Es cierto, yo lo hice, pero mi papi a mí me ha hecho lo mismo, me vistió dos veces de mujer y me lastimó; la última vez me llevó al baldío, en los fondos de la escuela. Me pintó la boca y me hizo cosas".
Versión de forenses
Para la mujer, "por miedo o qué sé yo, creo que no me dice todo. Pero dos médicos (uno forense) confirmaron los abusos. En el mayor, de años..."
Recordó la madre que al separarse del acusado, "él (hijo) iba mucho a la casa del padre. Con él comía. No puedo creer el daño que le ha provocado", ahondó.
¿Su hijo se vestía de mujer para abusar del hermanito menor?, interrogó EL LIBERAL. "Sí", señaló ésta y explicó que su hijo sufre pesadillas. De hecho, "yo también no duermo hace dos noches", agregó.
"Él llora de noche. Hasta se llegó a hacer sus necesidades en la cama; cómo puedo tener paz; no sé cómo ayudarlo y todo lo pongo en manos de psicólogos".
En las últimas 48 horas, los dos niños fueron ante forenses. El mayor les habría requerido: "Ya no quiero hablar más de lo que me pasó por favor".
Minutos después, una comisión policial aprehendió al sospechoso, mientras trabajaba en el Cepsi.
Tiene dos funciones. La restante, como contratado en la comuna capitalina.
Cámara Gesell
Ahora, la jueza Lucrecia Martínez Llanos y la fiscal Aída Farrán Serlé planifican la Cámara Gesell.
Los dos niños explicarán (por separado). El mayor, su historia con el padre. El menor, los hechos en que su hermano se vestía de mujer para abusarlo.
"Sabe, tiene 13 años; una edad decisiva en su personalidad. Su padre no dimensiona el daño que le ha provocado", destacó la mujer sollozante.
A su lado, su actual pareja intenta consolarla.
"Al comienzo, pensé cuaquier cosa. Hasta que mi marido sea el responsable. Pero no. Mi hijo mayor me confirmó que esas cosas se las hizo su padre", destacó. Recién ahora ésta descubre por qué su hijo mascullaba bronca y tristeza. "Por años, mi hijo decía: ‘Ya me va a pagar mi papi; algún día me va a pagar...." l