Lázaro Baéz está ante la Justicia contra Cristina Kirchner y Casanello
El empresario fue trasladado desde Ezeiza a Comodoro Py para ampliar ante la Cámara Federal su acusación de una reunión en Olivos entre la expresidenta y el juez que lo detuvo.
Lázaro Báez llegó a los tribunales con casco y chaleco en una camioneta del Servicio Penitenciario. El empresario K fue trasladado en medio de un impresionante operativo de seguridad que lo custodió en su traslado desde el penal federal de Ezeiza hasta Comodoro Py, en Retiro.
A partir de las 10 Báez jugará su carta para influir en el apartamiento del juez federal Sebastián Casanello, que investiga la causa de "la ruta del dinero K". Tras la recusación que hizo su hijo menor Leandro Báez, el detenido empresario K ampliará detalles ante la Cámara Federal porteña sobre la reunión que habrían tenido en Olivos el magistrado y la entonces presidenta Cristina Kirchner. Báez pediría que sus palabras fueran comprobadas con el registro de las cámaras de seguridad del barrio bonaerense.
Lázaro declarará ante el tribunal que debe resolver sobre la situación del juez, al que los Báez acusan de "direccionar" el proceso contra ellos y de "desligar" a funcionarios públicos. La Cámara hizo lugar al pedido que había hecho el titular de Austral Construcciones SA, que ofreció a los jueces ampliar detalles de la reunión de la que habría sido testigo, a partir de una carta con su firma que le hizo llegar al tribunal.
El empresario confirmó el martes a la Cámara que escribió de su "puño y letra" una nota sobre el tema y ratificó su contenido, según el escrito presentado por sus abogados Daniel Rubinovich y Rafael Sal Lari. "Puedo ofrecer mi testimonio sobre los acontecimientos de los que participé", insistió Báez. De acuerdo al empresario K el encuentro fue en la Quinta de Olivos en septiembre de 2015 y pediría que se analice el contenido de varias cámaras de seguridad públicas del barrio.
Lázaro escribió la carta el 9 de junio, el mismo día que la expresidenta negó que se hubiera encontrado con Casanello. "Se difunden decenas de publicaciones orales, escritas y televisivas sobre reuniones que nunca tuve con gente que ni siquiera conozco", habìa indicado Cristina al respecto.
Báez está preso desde el 5 de abril, alojado en la cárcel de Ezeiza. Está sospechado de integrar una red de corrupción con la obra pública en el kirchnerismo y procesado por lavado, en una causa que está a cargo de Casanello y del fiscal federal Guillermo Marijuan.
El abogado del hijo menor de Báez, Santiago Viola, adelantó que si la Justicia aparta a Casanello mostrarán la carta que les habría enviado la expresidenta.
"Creo que es importante para demostrar que la expresidenta tiene un interés en la causa, pero no sirve de nada si del otro lado hay un juez que no quiere investigar. Por eso, es importante tener un juez imparcial".
Para Viola "no hay dudas" de que Cristina sabía de las "inconsistencias" en la adjudicación de obra pública durante su gestión. Además acusó a Casanello de proteger a exfuncionarios kirchneristas.