El fuego en Mafalda se reavivó en dos oportunidades y clausuraron los locales por peligro de derrumbe
Las pericias preliminares y la inspección determinó que las estructuras sufrieron severos daños y ordenaron que nadie ingresara.
El incendio en el local comercial Mafalda que se originó en la tarde del jueves se reavivó ayer en dos oportunidades, lo que obligó a la rápida intervención de los bomberos. Una vez controlada la situación, la Justicia ordenó la clausura preventiva por peligro de derrumbe.
La encargada del local ubicado en la Peatonal Tucumán, identificada como Elisa Rodríguez (39), llegó minutos antes de las 18 del jueves para iniciar la tarde de trabajo, subió la llave térmica y habría advertido que se produjo un cortocircuito y que en la parte posterior del edificio se inició un foco ígneo.
Lo que vino a partir de ese momento es historia conocida. El fuego se propagó rápidamente entre la mercadería del local que estaba en el depósito, cuyas paredes, techo y escalera, se fueron consumiendo por las llamas de forma incesante.
El esfuerzo de los bomberos de la Policía y Voluntarios se extendió por nueve horas, con las dificultades del caso: difícil acceso al comercio, el excesivo humo tóxico, la falta de luz natural y la imposibilidad del ingreso de los camiones cisterna a la Peatonal por los locales ubicados en el medio, entre otros.
Alrededor de las 3 de la madrugada de ayer, el fuego estaba controlado. Sin embargo, alrededor de las 6, las llamas se reavivaron y los bomberos tuvieron que regresar.
Idéntica situación ocurrió alrededor de las 15, después de que los propietarios de Mafalda (de apellido Schammas) y empleados, hayan removido parte de la mercadería y los escombros, ante la mirada de decenas de "curiosos".
En ambas situaciones los bomberos pudieron controlar las llamas nuevamente. Luego realizaron las pericias correspondientes para establecer las causas que originaron el siniestro. Un informe preliminar habría señalado como una posible causal una falla en la luminaria.
El daño reportado en la estructura, obligó a la Justicia que ordenara la clausura preventiva de Mafalda y Clandestine, local colindante, donde también se registraron daños y pérdidas.