Oración al Señor de los Milagros de Mailín

Misericordioso Jesús, siendo vos la grandeza y la inocencia misma, te humillaste hasta ser clavado en la cruz y morir por nuestro amor, y no satisfecho aún, has levantado en Mailín un nuevo trono de tus misericordias.
¡Oh Señor de Mailín! Aquí me tienes humildemente postrado para pedirte perdón por mis ingratitudes y agradecer tus favores.
Creo en Vos, Jesús mío; ayúdame y fortaléceme para servirte digna y constantemente con mis pensamientos, palabras y acciones en todos los instantes de mi vida. Amén.



Oración al Señor de Mailín, pan de nuestro pueblo

¡Señor de Mailín!
Sos grano de trigo sembrado
Que en la espiga floreció
Con lágrimas amasado
Y horneado en el dolor.

Sos pan para tu pueblo
Entregado como Don,
Abundancia en la pobreza
Y alegría en el dolor.

Bendice hoy a nuestro pueblo
Que saciado con tu Don,
Quiere ser para su hermano
Pan de amor y comunión.
Amén.




Oración del Peregrino

Señor Jesucristo tu eres el Camino, la Verdad y la Vida.
En esta peregrinación al Santuario de Mailín te pedimos la gracia:

•del aumento de nuestra fe
•de la confirmación de nuestra esperanza
•de la renovación de nuestro compromiso bautismal
•de la profundización del amor y la caridad.
Que seamos siempre fieles testigos de la verdad y colaboradores de la edificación del reino de Dios entre nosotros.
Que tu luz siempre ilumine nuestros caminos, tu palabra nos guíe y tu bendición nos acompañe.
Esto te pedimos por la intercesión de tu Santísima Madre, la Virgen María quien nos has dado también como nuestra Madre y como modelo de nuestra fe. Amén.




Himno Antiguo al Señor de Mailín

Estribillo:
Venimos con santo empeño,
Del más lejano confín,
De este suelo santiagueño
A adorarte, dulce dueño,
¡Santo Señor de Mailín!

Ante la cruz redentora
nuestros padres se postraron,
y de tu mano alcanzaron
la gracia confortadora.
(estribillo)

Siguiendo a nuestros mayores
en amor, fe y esperanza,
hoy llegamos con confianza
en busca de tus favores.
(estribillo)

Con el alma arrepentida
nuestras culpas deploramos,
y en la confesión ansiamos
hallar la gracia perdida.
(estribillo)

Tu cuerpo sacramentado
en la Hostia comeremos,
y en El fuerza encontraremos
para vencer el pecado.
(estribillo)

Bendice desde tu leño
del matrimonio los lazos,
pa’ que formen sus abrazos
un digno hogar santiagueño.
(estribillo)

Señor de Mailín te damos
al partir la despedida
de nuestra alma entristecida
y quieras Tú que volvamos.
(estribillo)
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